Una sensible crecida en los niveles del río Tula fue la que se registró durante las últimas 12 horas situación que ha provocado temor de la población de esta ciudad de un nuevo desbordamiento que pudiera afectarlos, como el ocurrido en septiembre de 2021.

El miedo aumentó también porque empresas como la línea de transporte de pasajeros AVM Ovnibus suspendió las salidas de instalaciones de la central de autobuses, por encontrarse en una zona de riesgo de inundación, como ocurrió hace dos años.

De manera temporal, la empresa anunció que brindará su servicio en el estacionamiento de una tienda departamental.

También durante la madrugada se registró un incidente en el río, luego de que un trabajador de iniciales U.R.E., de 23 años, quien se encontraba al cuidado de maquinaria que realiza los trabajos de reencauzamiento del caudal quedó atrapado por un deslave y tuvo que ser rescatado con el apoyo de maquinaria pesada.

Sobre este incidente, el presidente municipal sustituto de Tula, Mario Guzmán Badillo, afirmó que la empresa pues dio a conocer que fueron alertados de que el río incrementaría su caudal y aun así no sacaron la maquinaría.

Además, el alcalde afirmó que la situación se encuentra en calma y que no existe riesgo de desbordamiento del río.

En tanto que la dirección de Protección Civil de Tula de Allende confirmó que el caudal ya está bajando, sin embargo, se mantiene recorridos en cuatro puntos de la ciudad siendo estos Rancho Chapultepec, colonia 16 enero, calle Xóchitlquetzal y puente Benicia.

Se pidió a la población no acercarse a riveras con bases endebles, mantenerse atento a los comunicados oficiales y no difundir información falsa.

La inundación de Tula ocurrida entre la noche del 6 y madrugada del 7 de septiembre de 2021 afectó el patrimonio de más de 30 mil personas y cerca de 4 mil viviendas.