La Ciudad de México (CDMX) podría quedarse sin agua en poco tiempo y llegaría el temido Día Cero, fecha en donde el líquido faltaría y sería insuficiente para todos los que habitan en esta entidad. 

Si las condiciones de sequía, desperdicio y deficiente gestión del agua continúan en el Valle de México existe un escenario en que el Día Cero llegue en 2028 a la CDMX, alertaron especialistas de la Universidad Autónoma de Metropolitana (UAM).

La idea del Día Cero es, justamente, no tener capacidad, porque no llueve, de disponer de reservas de agua suficientes para atender las necesidades poblacionales”, dijo Roberto Constantino, integrante de la Red de Investigación agUAM.

En conferencia de prensa encabezada por el rector de la UAM, José Antonio De los Reyes, para presentar el programa de radio institucional AguaCero, los especialistas urgieron a tomar decisiones y emprender proyectos para garantizar la filtración y la reinyección del agua al subsuelo.    

Delia Montero, también integrante de la Red de Investigación agUAM, dijo que los capitalinos viven en un muy alto estrés hídrico y, aunque no hay conciencia de ello, en riesgo latente de quedarse muy pronto sin agua.

Estamos actuando de una manera muy irresponsable, no vamos a traer agua de más lejos porque se la quitamos a otros y eso genera conflictos, no podemos extraer agua de pozos más profundos porque sale con metales, provoca hundimientos, es decir, estamos en una situación complicada, qué hacer, buscar formas de tratar el agua y reinyectarla y formas de gestión diferente”, dijo.  

CDMX, en riesgo de quedarse sin agua

Los especialistas dijeron que se pueden desarrollar obras masivas para garantizar la filtración del agua al subsuelo, construyendo pozos de absorción, instalando red de drenaje pluvial separada de las aguas negras, entre otras soluciones.

El rector De los Reyes Heredia propuso cambiar masivamente en toda la ciudad los pavimentos y concretos de todas las calles y las banquetas por materiales permeables como con el que se construyó el Parque Cuitláhuac, en Iztapalapa.

En lugar de poner concreto indiscriminadamente, es retirar concreto, pensar en materiales que también permitan la permeación del agua, se ha hecho con todos los espacios en el oriente de la ciudad, el Parque Cuitláhuac, y muchos otros más, que con estas soluciones permiten la filtración del agua para que los mantos freáticos y, en particular, los pozos que tenemos se puedan explotar y, básicamente, eso habría que hacerlo a la escala mayor de la Ciudad de México”, dijo. 

Los capitalinos debemos dejar atrás la idea de que el agua que usamos se desecha masivamente a través del drenaje y comenzar a utilizar tecnologías para limpiarla y reutilizarla varias veces, agregaron.

Si nosotros no tomamos decisiones para que toda el agua residual que se desecha normalmente, a través de drenaje, no tiene ningún otro fin más que considerarla agua de desperdicio, en lugar de generar procesos tecnológicos que nos permitan mediante un muy estricto programa de reutilización, nos permita reincorporar algunos de estos flujos en nuestro propios sistemas de distribución, emulando a la naturaleza, es decir, son soluciones basadas en lo que hace la naturaleza”, dijo Constantino.