La candidata a la alcaldía de Benito Juárez, Leticia Varela, enfrenta un rechazo rotundo por parte de los vecinos de varias colonias de la demarcación. Los residentes han dejado claro que no desean su visita ni su gestión en la alcaldía, manifestando un profundo descontento con su campaña y su partido, Morena.

Uno de los principales motivos de la molestia es el problema del agua contaminada que ha afectado a diversas colonias de Benito Juárez. Los vecinos señalan que tanto Leticia Varela como su partido no demostraron apoyo ni ofrecieron soluciones efectivas para enfrentar esta grave situación. La falta de respuesta y la aparente indiferencia hacia un problema tan crítico han dejado una profunda huella de desconfianza y frustración entre los residentes.

Durante los episodios de agua contaminada, los vecinos esperaban una acción rápida y decisiva por parte de las autoridades. Sin embargo, en lugar de recibir ayuda, se encontraron con silencio y promesas vacías. Esta inacción ha generado un sentimiento de abandono y ha fortalecido la oposición a la candidatura de Varela.

La indignación de los residentes se ha manifestado de manera clara y contundente. En múltiples colonias, se han organizado para rechazar cualquier visita de Leticia Varela, expresando que “no la queremos en nuestras casas ni en la alcaldía”. Este rechazo no solo refleja el descontento con su manejo del problema del agua, sino también una desconfianza general hacia su capacidad para liderar y resolver los problemas de la comunidad.

El rechazo de los vecinos de Benito Juárez es un reflejo de la desconexión entre las promesas de campaña y la realidad vivida por los ciudadanos. La candidatura de Leticia Varela, que pretende basarse en la honestidad y la eficiencia, se ve gravemente comprometida por estos episodios de desatención y falta de apoyo.

En resumen, Leticia Varela enfrenta una fuerte oposición en Benito Juárez debido a su gestión deficiente y la falta de respuesta ante problemas críticos como el agua contaminada. Los vecinos, cansados de promesas incumplidas y de una falta de acción efectiva, han dejado claro que no desean su presencia ni su liderazgo en la alcaldía. Esta situación pone en evidencia la creciente desconexión entre la candidata y los ciudadanos, quienes buscan un liderazgo auténtico y comprometido con sus necesidades reales.