Integrantes de ocho grupos criminales asedian a los capitalinos, diagnosticó el Colegio de México de acuerdo con informes de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) capitalina y de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.

El Informe de Resultados del Análisis de las Estrategias y Políticas de Seguridad de la Ciudad de México 1994-2024, elaborado por esa institución, dio cuenta de lo anterior y mencionó los nombres de los grupos: Los Peluches en alianza con el Cártel de Caborca, Nuevo Imperio, el Cártel de Tláhuac, La Familia Michoacana, La Nueva Alianza conformada por La Unión Tepito con el Cártel Jalisco Nueva Generación, Los Catalinos, Los Gastones y Los Rodolfos.

La revisión corrió a cargo del doctor Rodrigo Peña González, quien en el apartado 10.3 del documento, con el título Crimen Organizado Metropolitano, aborda este fenómeno. Recordó que fue negado insistentemente por Miguel Ángel Mancera a su paso por la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, lo cual, según el autor, fue cercano a la negligencia y que el operativo contra el Cártel de Tláhuac, en el cual murió su fundador, fue posiblemente el punto final y la bancarrota de su estrategia.

“Actualmente, la Ciudad de México es un espacio ambiguo y de contrastes con respecto a la problemática del crimen organizado. Por momentos, se le percibe como el oasis de paz de los sexenios más violentos. En otras ocasiones parece que esa paz puede romperse, como se constató con el atentado al secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch”, advirtió Peña González.

El investigador del Colegio de México recolectó materiales difundidos en las redes sociales, con los cuales documentó la idea de un avance paulatino de grupos criminales ya consolidados en la Zona Metropolitana del Valle de México hacia las alcaldías fronterizas, como Gustavo A. Madero, Tláhuac e incluso Tlalpan.

Otro de sus hallazgos es que en la capital del país existen desde hace tiempo grupos criminales con presencia local en Tláhuac, Tepito, Plateros y Cuautepec, pero también empiezan a llegar de otras entidades para asentarse y dedicarse principalmente a extorsionar.

El autor exhortó a las autoridades a emprender un buen análisis sobre el fenómeno del crimen organizado en la capital que ayude al diseño y aplicación de una política de seguridad eficiente, cuyo objetivo sea enfrentar al crimen organizado como un problema integral que afecta a la vida de un gran número de ciudadanos y también atienda “la hipotética crisis de inseguridad” vinculada con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.

También sugirió a las autoridades impulsar un análisis de criminalidad urbana para el desmantelamiento de grupos criminales de la Ciudad de México.

“Al respecto, se recomienda profundizar en dos ángulos: por un lado, en las características urbanas de los grupos criminales en la capital; por el otro, ampliar la visión territorial entre la Ciudad de México y el territorio del Estado de México para documentar de qué manera los grupos criminales se aprovechan de la ZMVM para sus actividades. Al respecto, el ataque a la extorsión es fundamental”, planteó el investigador del Colegio de México.

Al respecto, Pablo Vázquez Camacho, titular de la SSC, dio a conocer que durante la presente administración la corporación a su cargo llevó al desmantelamiento de 295 células delictivas, detuvo a 168 generadoras de violencia y dos mil 732 detenidos y que eran integrantes de grupos delictivos.